¿Podrían sobrevivir los alienígenas a un apocalipsis ambiental?

Muchos lugares de planeta no han sido ajenos a los dañinos efectos causados por el cambio climático. Si pensamos en ellos en una escala global tendremos una visión apocalíptica: bosques secos y arrasados por el intenso calor, mares que aumentan su caudal debido al deshielo de los glaciares, humanos sucumbiendo ante la falta de alimento.

Sin duda, en algún momento nos hemos preguntado si este apocalipsis podría ser inevitable, o si nuestra civilización dependiente de la tecnología podría evitar llegar a su fin debido a los cambios planetarios. Ahora, un grupo internacional de científicos han planteado escenarios con hipotéticas civilizaciones alienígenas, para determinar si es posible que una sociedad sostenible pueda sobrevivir a estos inclementes eventos.

Adam Frank, astrofísico de la University of Rochester, junto a su equipo han ideado una serie de modelos matemáticos para evaluar cómo ocurriría el desarrollo de una sociedad alienígena tecnológicamente avanzada, o «exosociedad», en un planeta en evolución.

Para realizar su investigación, los científicos utilizaron ejemplos históricos con los cuales generaron sus modelos. Incluyeron casos como el de la Isla de Pascua, muy conocida por sus gigantes estatuas, y en la que su población estuvo a punto de extinguirse durante el siglo XVIII.

Frank dijo en un comunicado:

Lo que sabemos sobre la Isla de Pascua es que la gente llegó allí tal vez en el año 400 d.C. y construyó una civilización vibrante. Creemos que sobrepasaron la capacidad de carga de su isla. Usaron todos sus recursos y sus números bajaron bastante rápido… básicamente, la civilización colapsó”.

Los científicos diseñaron cuatros escenarios diferentes que simulen lo que podría atravesar una civilización: extinción, sostenibilidad, colapso sin cambio de recursos y colapso con cambio de resursos.

En el escenario de extinción, una civilización en la que su población aumenta rápidamente, alcanzaría su punto máximo, y empezarían a morir a medida que las temperaturas aumentan y la comida escasea. Sin embargo, la población no desaparecería por completo, pero solo quedaría una fracción de lo que era antes.

Frank agregó:

Imagínese si 7 de cada 10 personas que usted conoce murieran rápidamente. No está claro si una civilización tecnológica compleja podría sobrevivir a ese tipo de cambio”.

En el escenario de sostenibilidad, el aumento de la población y las temperaturas llegan a alcanzar un equilibrio constante. Las sociedades compensan las crecientes presiones ambientales al cambiar a recursos de bajo impacto como la energía eólica y solar. Pero, si una civilización no frena el uso de los recursos, podría enfrentar una situación de colapso sin cambio de recursos, donde la población crecerá rápidamente, llegará a su punto máximo y luego se desplomará. En este escenario, la civilización podría desaparecer por completo.

Estos cuatro gráficos muestran los escenarios de supervivencia modelados por los autores del estudio. Crédito: Michael Osadciw / University of Rochester

Sin embargo, el escenario más aterrador, como dijo Frank, es el colapso a pesar del cambio de recursos. Una civilización comenzaría a utilizar recursos de bajo impacto, pero ya será demasiado tarde. Aunque este caso la extinción de la población se ve retrasada, finalmente ocurre.

Frank agregó:

Incluso si hicieras lo correcto, si esperaste demasiado, igual podrías colapsar tu población”.

Los autores han indicado que este estudio brinda «una representación muy simplificada» de un tema increíblemente complejo, y por lo tanto se plantea como un ejercicio intelectual en lugar de una caracterización confiable del futuro de una civilización. Sin embargo, y como dice Frank, aún proporciona una clara advertencia a tomar en cuenta para nuestra civilización.

Frank agregó:

Si cambias el clima de la Tierra lo suficiente, es posible que no puedas revertirlo. Estos modelos muestran que no podemos solo pensar en una población que evoluciona por sí misma. Tenemos que pensar en nuestros planetas y civilizaciones en evolución conjunta”.

El estudio científico ha sido publicado en la revista Astrobiology.