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lunes, 9 de julio de 2018

Reconocido científico asegura que se oculta la verdad sobre los asteroides asesinos

La NASA confirmó que un asteroide explotó sobre la ciudad rusa de Lípetsk el 21 de junio de 2018. El inusual fenómeno espacial fue visto desde las ciudades de Kursk, Vorónezh y Oriol, y algunos residentes se sorprendieron al ver la bola de fuego explotando en el cielo y luego caer hacia la tierra. Los testigos también informaron de una fuerte explosión debido al impacto. Pero lo que más llamó la atención es que el incidente se conoció gracias a un ciudadano ruso, quien lo grabó y posteriormente lo publicó en las redes sociales.

A pesar de que la NASA dice estar iniciando planes para detectar asteroides potencialmente peligrosos o PHA, no fue capaz de detectar la roca espacial sobre Rusia hasta que impactó. El Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el Instituto de Tecnología de California (Caltech) detectó el asteroide después de explotar, y el análisis inicial reveló que el cuerpo espacial alcanzó la Tierra a una velocidad de 14.4 kilómetros por segundo.

Pero este no es un caso aislado ya que el 15 de febrero de 2013, un superbólido cruzó la atmósfera y cayó cerca de la ciudad rusa de Chelyabinsk, causando gran cantidad de daños en edificios y casi 1.500 personas heridas. Y tampoco nadie vio venir la roca espacial.

Como hemos comentado anteriormente, la NASA ha anunciado una iniciativa que sirve como un plan de contingencia en caso de la llegada de un asteroide potencialmente peligroso. Sin embargo, no todos están de acuerdo con las medidas para protegernos de los PHA, y eso incluye al ex jefe de tecnología de Microsoft, Nathan Myhrvold, quien ha criticado duramente a la NASA y su Misión Explorador de Estudios en Infrarrojo (NEOWISE en sus siglas en inglés), además de asegurar de que la agencia espacial estadounidense oculta la verdad sobre los asteroides mortales.

Las mentiras de la NASA
En una reciente entrevista al periódico británico The Guardian, Myhrvold explica cómo la NASA analiza los datos recopilados por la misión NEOWISE en los últimos cuatro años. Y al aparecer la agencia espacial estadounidense ha tomado decisiones incorrectas de los métodos estadísticos, además de acusar a los miembros del equipo NEOWISE de encubrir la verdad al no publicar información que podría haber sido útil para cualquiera que quiera rebatir los resultados. En otras palabras, cree que la NASA sobreestimó o subestimó el tamaño de los asteroides en los últimos años, lo que podría ser un auténtico desastre, algo que el mundo no puede permitirse debido a la naturaleza potencialmente catastrófica de los “asteroides asesinos”.

“El efecto cambia dependiendo del tamaño del asteroide y de qué está hecho”, dijo Myhrvold al The Guardian. “Los estudios se anunciaron con una precisión de más o menos 10 por ciento. De hecho, es más como 30-35 por ciento. Eso a nivel general. Si miras subconjuntos específicos, algunos de ellos están desactivados en más del 100 por ciento.”


Como explicó la NASA en un comunicado de prensa a principios de este año, la misión NEOWISE se reinició en diciembre de 2013, cuatro años después de su lanzamiento y dos años después de que se colocara temporalmente en hibernación. Hasta abril, la misión había detectado un total de 29.375 objetos espaciales en cuatro años, incluidos 788 asteroides y 136 cometas. Diez de estos objetos se clasificaron como asteroides potencialmente peligrosos (PHA), debido a su mayor tamaño y su proximidad a la órbita de la Tierra.
Y comentado sobre la decisión de la NASA de apoyar los hallazgos de NEOWISE a pesar de las imprecisiones percibidas, Myhrvold dijo a The Guardian que la agencia espacial estadounidense tiene miedo de admitir que cometió errores. Según el artículo de 33 páginas escrito por al ex jefe de tecnología de Microsoft, los resultados de la misión deben ser sometidos a una investigación independiente para verificar su precisión de una vez por todas.

“La gente me ha sugerido que la razón por la cual la NASA no quiere admitir que algo anda mal con los datos es que temen que perjudique las posibilidades de que Neocam, un telescopio de aproximadamente 500 millones de dólares, encuentre asteroides que puedan impactar contra la Tierra”, comentó Myhrvold.

Y como era de esperar, las declaraciones de Myhrvold han provocado todo un terremoto en la comunidad científica. Por su parte, los científicos de NEOWISE han comentado el estudio de Myhrvold, y la respuesta ha sido igual de contundente que sus declaraciones.

“El equipo NEOWISE destaca por sus datos y hallazgos científicos que se han publicado en varios artículos de revistas revisadas por otros investigadores”, dijo un portavoz de la NASA en un comunicado oficial. “La NASA confía en que los procesos y análisis realizados por el equipo NEOWISE son válidos, según lo verifican investigadores independientes.”

Mientras tanto, el cosmólogo y director del proyecto NEOWISE Edward L. Wright, calificó la publicación de Myhrvold como “un desperdicio de papel”.

“Ante la llegada de un asteroide lo único que podemos hacer es rezar”


Lo que muchos se estarán preguntándose es que, si la NASA u otras agencias espaciales no son capaces de detectar la llegada de asteroides potencialmente peligrosos, ¿entonces qué podemos hacer? Los eventos como los ocurridos en Rusia sirven como evidencia de que vivimos en un sistema solar lleno objetos potencialmente peligrosos con la capacidad de acabar con la vida en nuestro frágil planeta.


Los expertos en la materia nos dicen que hasta el momento hemos tenido mucha suerte, pero un asteroide de un kilómetro o más podría terminar en cualquier momento con la civilización. Y lo más alarmante de todo es que solo aproximadamente el 10 por ciento de 10.000 “asteroides asesinos” han sido detectados por los más avanzados sistemas. Además, se estima que objetos espaciales de ese tamaño impactan contra la Tierra aproximadamente una vez cada 1.000 años, por lo que en estos momentos ya estamos superando todos los cálculos.

Incluso el ex jefe de la NASA Charles F. Bolden en 2013 habló sobre el peligro de los asteroides, y dejó claro que con la información que actualmente dispone la agencia espacial estadounidense no es posible saber de la llegada de un asteroide, “pero si viene dentro de tres semanas” lo único que podemos hacer es rezar.
Creo que podemos decir que a estas alturas ya no nos debería sorprender que la NASA nos oculta información sobre el peligro de asteroides asesinos. Ahora bien, también hay que pensar que ocurriría si la población supiera que una de estas rocas espaciales apocalípticas se está dirigiendo hacia nuestro planeta, provocaría el caos y el mundo se convertiría en un verdadero infierno antes de la llegada de dicho asteroide. Por lo que a veces es mejor no saberlo todo.
¿Esto simplemente se trata de una polémica entre científicos, o la NASA está ocultando la verdad sobre los asteroides potencialmente peligrosos? ¿Realmente queremos saber la verdad?

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