Próxima b, el planeta descubierto este verano en la zona habitable de la estrella más cercana al Sol, a unos 4 años luz, puede albergar un gran océano en su superficie.
Un equipo que incluye a astrofísicos del CNRS –el organismo oficial de investigación en Francia– ha calculado las propiedades de tamaño y de la superficie del planeta llamado Proxima b, y concluye que puede ser un “planeta océano” similar a la Tierra.Se estima que tiene una masa de aproximadamente 1,3 veces la de la Tierra y orbita alrededor de 7,5 millones de kilómetros de su estrella, una décima parte de la distancia más interna planeta Mercurio del Sol.
“Al contrario de lo que cabría esperar, esta proximidad no significa necesariamente que la superficie de Proxima b sea demasiado caliente para que exista agua en estado líquido”, según un comunicado del CNRS.
Próxima Centauri, su estrella, es más pequeña y 1.000 veces más débil que el Sol, lo que significa que Proxima b está exactamente a la distancia correcta para condiciones que sean potencialmente de habitabilidad.
“El planeta puede muy bien albergar agua líquida en su superficie, y por lo tanto también algunas formas de vida“, señala el comunicado.
El tamaño de los exoplanetas se calcula generalmente mediante la medición de la cantidad de luz que bloquean, desde la perspectiva de la Tierra, cuando pasan frente a su estrella madre.
Pero ese tránsito de Proxima b todavía no se ha observado, por lo que el equipo tuvo que depender de simulaciones para estimar la composición y el radio del planeta. Ellos calcularon un radio de 0,94 a 1,4 veces el de la Tierra, que tiene 6.371 kilómetros en promedio.
Suponiendo un radio mínimo de 5.990 kilómetros, el planeta sería muy denso, con un núcleo metálico que constituye dos tercios de la masa de todo el planeta, rodeado por un manto rocoso.
Si hay agua superficial, no supondría más de un 0,05 por ciento de la masa total del planeta, algo superior a la Tierra, donde es alrededor de 0,02 por ciento.
En el escenario de planeta más grande, con un radio de 8.920 kilómetros, la masa de Proxima b se dividiría 50-50 entre un centro rocoso y el agua circundante. “En este caso, Proxima b estaría cubierto por un solo océano líquido 200 kilómetros de profundidad”, dijo el CNRS.
“En ambos casos, una atmósfera gaseosa delgada podría rodear el planeta, al igual que en la Tierra, lo que hace Proxima B potencialmente habitable”, concluye.
(Fuente: europapress.es)
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