Funcionarios militares surcoreanos habían informado que las maniobras navales a gran escala de EE.UU. y Corea del Sur incluyen el ensayo del asesinato de Kim Jong-un.
Pionyang ha condenado los ejercicios navales conjuntos a gran escala de Corea del Sur y EE.UU., y ha calificado a esas maniobras de una "grave provocación" que está "empujando a la ya inestable península coreana a la peor crisis", informa la agencia UPI.
Medios oficiales norcoreanos citados por la agencia, señalaron que un "ataque preventivo contra Corea del Norte sería un preludio de la autodestrucción" de Seúl y Washington.
Funcionarios militares de Corea del Sur indicaron que los ejercicios Espíritu Invencible 2016, que tienen lugar en las costas surcoreanas desde el 10 al 16 de octubre, incluyen prácticas de ataque preventivo a larga distancia contra instalaciones nucleares norcoreanas, así como bombardeos contra la cúpula militar norcoreana y su líder supremo, Kim Jong-un. Además señalaron que estos ataques son una opción que se utilizaría en caso de un ataque nuclear inminente de su vecino del norte.
Por su parte, los medios oficiales norcoreanos han advertido que la "paciencia" de Corea del Norte "tiene límites" y que deben tener en cuenta que esa nación es ahora una "potencial nuclear y espacial" y que los objetivos estadounidenses en el Pacífico están a su alcance.
En Espíritu Invencible 2016 participan decenas de buques, entre los que destaca el portaaviones estadounidense de propulsión nuclear USS Ronald Reagan, que tiene su base en Japón, además de varias aeronaves de combate. Washington y Seúl "no deben olvidar" que su ataque preventivo contra Pionyang los "guiará a una inimaginable y desgraciada autodestrucción", sentenciaron medios norcoreanos.
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