La turista búlgara estaba de vacaciones en el lago Ocrida (Macedonia) cuando sacó al ave del agua, forcejeó con él y lo abandonó sin vida en la playa

Hace pocos días conocíamos la historia del delfín que murió a manos de unos turistas que se estaban haciendo fotos con él en Argentina. También la noticia de un hombre que sacó del mar a un tiburón con el mismo propósito. Y como no hay dos sin tres, conocemos la macabra anécdota protagonizada por una mujer y un cisne.

Al igual que en los dos primeros casos, la mujer quería hacerse un selfie con el pobre animal, y para ello lo agarró de las alas y lo sacó de su hábitat natural, un lago de Macedonia. Tras arrastrarlo a la orilla y mantenerlo firmemente sujeto, la desalmada consiguió su objetivo, pero también hirió de muerte al pájaro. Después de hacerse la foto, lo dejó abandonado a su suerte y a las pocas horas su cadáver fue encontrado en el mismo lugar, según informa el Daily Mail.

Un testigo afirma en estado de shock que en un primer momento el cisne no se asustó cuando su asesina se acercó, ya que están acostumbrados a su presencia en el lago Ohrid. Pero tras ser apresado por ella, el cisne aleteó con fuerza para zafarse de su opresora. A pesar de que el pájaro estaba a disgusto, la mujer no paró de sonreír en toda la macabra sesión.

Tras hacerse públicas las imágenes, gracias a un reportaje de Macedonia Online, la responsable de la muerte se ha convertido en una de las mujeres más odiadas del país. Según la noticia, se trataría de una turista búlgara que actualmente se encuentra en busca y captura por la policía de Ohrid.