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lunes, 30 de marzo de 2015

LAS HUMILDES SEÑALES QUE SE NOS ENTREGAN


LOS SIGNOS DEL CIELO PARA LOS SIMPLES, LOS PUROS DE CORAZÓN Y PARA AQUELLOS QUE TIENEN FE EN LAS PROMESAS DE CRISTO. HOY, DESPUÉS DE DOS MIL AÑOS DE VUESTRO TIEMPO, LA HISTORIA SE REPITE: DIOS HABLA A LOS HUMILDES, PORQUE ES HUMILDE. ES AMOR INFINITO Y JUSTICIA SUPREMA.

¡SI TENÉIS OJOS PARA VER, MIRAD ESTOS SIGNOS!

POR MÁS QUE NO LO CREÁIS ANUNCIAN, CON HUMILDAD, LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO A LA TIERRA PARA JUZGAR AL MUNDO Y ESTABLECER EN VUESTRO HERMOSO PLANETA TAMBIÉN EL REINO DE DIOS. 


LOS SIGNOS DEL CIELO

Cuando en la mañana del 26 de marzo buscaba en los portales de Internet noticias para el programa de radio Tierra Viva, no sabía la sorpresa que me esperaba. No buscaba nada en especial, solo saber si había algo importante para comunicar. 
Al abrir la página de RT, encuentro un titular en el que se leía “EE.UU.: Un tornado deja un 'símbolo divino' que conmociona la Red”. 
La imagen ubicada debajo de la noticia era impactante: una larga fila de automóviles con las luces encendidas, el asfalto mojado por la lluvia, un desolador paisaje de casas bajas destruidas por la tormenta y el cielo más gris y amenazador que había visto en mucho tiempo. 
Por encima del suelo y debajo del Cielo, una cruz enorme se había formado con los restos de maderos que alguna vez habían sido parte de los postes de una red de servicios eléctricos y colgaba de los cables.
Comienzo a leer la noticia que informaba que el tornado que golpeó en la noche del miércoles 25 de marzo el Estado de Oklahoma había dejado una inesperada sorpresa a los habitantes de la ciudad de Moore.
Pero mi admiración aumenta cuando leo que: “Chase Rodas, un vecino de la localidad de 14 años, ha publicado en la Red la imagen de un objeto en forma de cruz colgado sobre un cable de electricidad justo después del paso del tornado”. 
“Acabo de encontrar esto después del tornado. Dios está con nosotros”, escribió el adolescente en su Twitter.
Sentí algo grande en mi interior. Me conmovió profundamente que fuera un joven de tan solo 14 años el que vio la cruz ante la indiferencia de todo el resto, el que además comprendió que se trataba de una señal divina, pero por sobre todo me emocionó que sintiera la necesidad de escribir “Dios está con nosotros”. 
La primera pregunta que me surgió fue ¿Cuál es el verdadero signo, la cruz o un joven tratando de despertar la conciencia de todos? ¿Cuántos signos más tienen que aparecer para que el hombre cambie? ¿Cuántos signos más nos dará el Cielo antes de que se agote su paciencia y nos haga sentir su ira?

Daniel Rodrigo
Rosario, Santa Fe, Argentina 

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