Aunque la forma más extendida de identificación es la contraseña alfanumérica, científicos alemanes han desarrollado una tecnología denominada SkullConduct utilizando el sonido único de nuestro cráneo.
Justo cuando se pensaba que la tecnología de la huella digital bastaba para liberarnos del riesgo de olvidarnos de la contraseña, un grupo de investigadores han dado un paso más allá.
Un equipo de investigadores alemanes de la Universidad de Stuttgart, la Universidad del Sarre y el Instituto Max Planck de Informática han desarrollado una tecnología de seguridad mejorada denominada SkullConduct utilizando el sonido único del cráneo de un usuario.
SkullConduct es un sistema biométrico provisto de un altavoz de conducción ósea (la conducción de sonido de oído a oído a través de los huesos del cráneo) y de un micrófono, tecnología ya proporcionada por los dispositivos como Google Glass. De esta forma, SkullConduct analiza la respuesta de la frecuencia de un sonido enviado a través del cráneo del usuario.
En otras palabras, la tecnología envía un patrón de sonido al cráneo del usuario y luego graba los sonidos únicos de respuesta. De esta forma, cada vez que el usuario quiere acceder al dispositivo, la tecnología repite el proceso para identificarlos a ambos. El experimento de SkullConduct tuvo éxito con 10 participantes con una precisión de identificación del 97%.
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