Se ha tenido que cerrar un aeropuerto del oeste del país por la expulsión de material incandescente y ceniza
Además, se ha ampliado la zona de exclusión hasta un radio de doce kilómetros a la redonda desde el cráter del volcán, según ha explicado el gobernador de Colima, Mario Anguiano, a través de su cuenta en Twitter.
Bajo una densa nubosidad y lluvia que caía sobre la zona, un equipo del Comité de Investigación Científica Jalisco-Colima ha sobrevolado el volcán, uno de los más activos del país y de 3,860 metros de altura, y ha detectado al menos tres bocas de desgasificación con salida de ceniza a alta presión en importantes cantidades, razón por lo que la caída de ceniza ha afectado a varios municipios de Colima y Jalisco.
En algunos de ellos se ha declarado el estado de emergencia. Los expertos han concluido que el sistema del conducto volcánico está abierto, por lo que en los próximos días continuará la fase eruptiva. Mantiene una actividad moderada constante con expulsión de material incandescente, ceniza, flujos piroclásticos y derrumbes sobre las laderas.
Por su parte, la Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación ha informado de tres posibles escenarios: uno, que continúe el flujo de lava con posibilidad de escurrimiento por tres puntos.
Dos, un evento explosivo que deslizaría la cámara del volcán a una profundidad de hasta siete kilómetros, provocando una erupción similar a la de 1913. En el tercer escenario se prevé un nuevo hundimiento del domo.
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