Buscar este blog

viernes, 9 de mayo de 2014

REESCRIBEN EL ALFABETO DE LA VIDA.

Científicos del Instituto Scripps (EE.UU.) crean el primer organismo vivo con tres pares de bases de ADN en lugar de los dos naturales


Al igual que el lenguaje se basa en una secuencia de letras cuyo orden da forma a las palabras, la vida también tiene su propio alfabeto genético. El alfabeto del ADN y de todas las formas de vida conocidas se escribe solo con cuatro «letras» (A,T,G,C ) combinadas en dos pares de bases (A-T y C-G) y su secuencia o combinación determina su significado, es decir la función de las proteínas y los genes.

Los organismos vivos que pueblan la Tierra (humanos, plantas, bacterias, hongos, animales....) tienen en su material genético solo esas cuatro letras o dos pares de bases escritas a lo largo de la evolución. Ahora, por primera vez, científicos del Instituto de Investigación Scripps de California (EE.UU.) han reescrito el genoma de un ser vivo al añadir a su ADN un par de «letras» adicionales que no se encuentran en la Naturaleza.

Ese nuevo par de bases artificial han sido bautizadas por el Instituto Scripps como d5SICSTP-dNaMPT, una combinación de letras casi imposible de recordar. Una vez generadas se incorporaron a una pequeña parte del genoma de una bacteria y esta la aceptó sin problema, sin reconocerlo como una anomalía. Es decir la bacteria con seis «letras» en su código genético funcionó con normalidad. Así demostraron los investigadores que podía ampliarse el alfabeto de la vida.
Bacteria semisintética

El resultado de este experimento es un organismo semi-sintético que nunca había existido antes. «Contiene de manera estable tres pares de bases. Esto demuestra que hay otras soluciones posibles para almacenar la información genética y nos acerca a emocionantes aplicaciones, entre ellas el desarrollo de nuevos y más potentes medicamentos», augura el director de la investigación, Floyd Romesberg.

El avance, al que la revista «Nature» dedica su portada, es una prueba de concepto, un ejercicio experimental pero también supone un salto vertiginoso hacia la creación en el laboratorio de nuevos seres vivos, con genomas a la carta. 

La creación de este «cyborg», este organismo semi-sintético se ha fabricado a partir de una bacteria muy conocida que puebla nuestro intestino, la «E. coli». Es también una de las bacterias preferidas por los científicos para manipular por su sencillez y de ahí la elección del Instituto Scripps.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.