20.000 abejas persiguen un coche durante 24 horas porque la reina estaba encerrada dentro

Una señora de Gales se encontró con más de 20.000 abejas pegadas a su coche tras visitar una reserva natural

En la naturaleza si hay algún insecto monárquico por encima del resto esas son las abejas. La reina lo es todo para ellas. Es la única fértil dentro de la colmena, la responsable de que continúe el crecimiento dentro del enjambre y por ello la protegen hasta la muerte.Tal es la devoción de las abejas por su reina que este fin de semana hicieron una gran demostración en Haverfordwest (Gales). Carol Howart, una mujer de 65 años, sufrió una invasión en la parte trasera de su Mitsubishi Outlander después de visitar una reserva natural.

El domingo por la mañana esta señora se disponía a regresar a su casa cuando un enorme zumbido captó la atención de un guardaparques local. Fue éste el que avisó a Carol de que tenía una pequeña invasión en su vehículo. Más de 20.000 abejas estaban aferradas al coche y suponía un grave peligro tanto para ella como los transeúntes.

Según explicó el guardaparques Tom Moses a The Guardian, “me di cuenta de una enorme mancha marrón en el coche y la avisé. Había visto enjambres asentarse en cualquier tipo de cosas, pero nunca uno tan grande como éste”. Moses, que sufrió alguna que otra picadura, decidió llamar a la brigada de apicultura de la zona para evitar que alguien eliminara de forma errónea la colonia de abejas.

Tras retirar el enjambre del coche la señora siguió su camino a casa pensando que ya se había acabado el problema. Aunque para sorpresa suya, el lunes por la mañana volvió a encontrarse el mismo problema en su vehículo. Otra vez miles de abejas estaban revolucionadas en la parte trasera. Justo en el mismo sitio.

Carol Howart volvió a informar a los apicultores y estos necesitaron varias horas para volver a retirar a los insectos del Mitsubishi Outlander. Según le explicaron los especialistas a Carol, “la teoría que tiene más fuerza es que la abeja reina se sintió atraída por algo en el coche, quizá algo dulce, y se metió por el hueco del limpiaparabrisas trasero o por una bisagra”.
Al quedarse atrapada dentro, todo el enjambre habría decidido seguir a su líder. Roger Burns, uno de los apicultores implicados, explicó a The Telegraph que no pudieron dar con la reina, ya que seguramente huyó mientras retiraban los miles de abejas.
(Fuente: lavanguardia.com)