Ya no es ningún secreto: la primera estación espacial china Tiangong-1 está en camino de estrellarse contra la Tierra durante este fin de semana. La empresa estadounidense The Aerospace Corporation cree que la estación espacial accederá en nuestra atmósfera el Domingo de Pascua (1 de abril). Tiangong-1, del tamaño de un autobús, viajará a unos siete kilómetros por segundo una vez que entre en la atmósfera. Es probable que esto provoque que la nave se desintegre. Pero los expertos advierten que varias partes de la estación espacial podrían caer en regiones de hasta 43 grados por encima o debajo del ecuador, aunque es poco probable que caigan en zonas habitadas.
Sin embargo, son muchos los que no están totalmente de acuerdo con la previsión de los científicos, ya que están convencidos de que las diversas agencias espaciales no están diciendo la verdad, que hay muchas posibilidades de que los restos del Tiangong-1 provoquen una gran catástrofe en nuestro planeta. Es más, al parecer una antigua profecía ya predijo la caída de la estación espacial china.
La estación espacial china fuera de control
La estación espacial china Tiangong-1 actualmente se encuentra fuera de control desplazándose a más de 27.000 kilómetros por hora y se espera que caiga en algún punto de nuestro plantea durante el fin de semana de Pascua. Tiangong-1, que significa “palacio celestial” en chino, puede entrar en la atmósfera sobre una gran ciudad y los científicos no lo sabrán hasta unas horas antes de que suceda.
La primera estación espacial china, que pesa aproximadamente ocho toneladas, debería haber tener un “reingreso controlado” sobre el Océano Pacífico a miles de kilómetros de la civilización. Pero en marzo de 2016 la Administración Espacial Nacional China (CNSA) perdió la comunicación con Tiangong-1 y los científicos chinos fueron incapaces de encender sus motores. Desde entonces ha estado orbitando en una espiral de muerte en constante descenso. El martes estaba a una altitud de 210 kilómetros y caía más rápido que nunca. Se esperaba que la estación espacial volviera a entrar en la atmósfera terrestre entre el 31 de marzo y el 4 de abril.
La CNSA afirmó que se desintegraría por completo en la reentrada, pero según expertos en el tema, para un objeto de ese tamaño, entre el 10% y el 40% podría sobrevivir a la bola de fuego, y los restos caerían a la tierra o al océano.
“Se puede suponer que Tiangong-1 se separará durante su reingreso a la atmósfera, y que algunas partes sobrevivirán al proceso y llegarán a la superficie de la Tierra”, dijo un portavoz de la Agencia Espacial Europea (ESA).
La estación entró en órbita en septiembre de 2011 y fue diseñada para probar tecnologías relacionadas con el acoplamiento en órbita. La agencia espacial china ha publicado poca información aparte de su altitud y, sin más detalles sobre su diseño, los científicos europeos y estadounidenses disponen de poca información sobre la cual basar sus predicciones para el área de impacto.
Actualmente está cayendo aproximadamente una vez cada tres minutos mientras orbita la Tierra 16 veces al día. Sin embargo, algunos expertos han minimizado el riesgo de impacto en zonas civilizadas. Han aconsejado a todo aquel que esté preocupado ha no cambiar su comportamiento diario, y que deben preocuparse más de cruzar la calle que de mirar hacia el cielo para ver si están a punto de ser impactados por desechos espaciales.
“En los últimos 60 años de vuelo espacial, nos estamos acercando a la marca de 6.000 reentradas no controladas de objetos grandes, en su mayoría satélites y etapas superiores de cohetes”, explicó Stijn Lemmens, un experto en desechos espaciales de la ESA. “Solo un evento produjo un fragmento que impactó a una persona y no resultó herida.”
Lemmens dijo que las probabilidades de ser impactado por desechos espaciales son de uno en 1.2 billones. La única persona que se sabe que fue golpeada por desechos espaciales fue Lottie Williams, en Tulsa, estado estadounidense de Oklahoma. En 1997, recibió un golpe en el hombro con una pieza de metal de 15 centímetros de un cohete Delta II.
Sin embargo, no todo el mundo se cree la versión oficial dada por las diferentes agencias espaciales. Son muchos los teóricos de la conspiración que aseguran que los restos de la estación espacial china Tiangong-1 caerán sobre grandes ciudades, provocando una de las mayores catástrofes de nuestra historia. Y los expertos están evitando a toda costa desatar el caos antes de que esto ocurra.
Y por si fuera poco, al parecer la caída del Tiangong-1 fue predicha por una tribu nativa americana, los “Hopi”. Según expertos en profecías, la estación espacial china se llama Tiangong-1, que significa “Palacio Celestial”, que coincide con la profecía Hopi. Además, la fecha del reingreso también parece coincidir con las profecías, al igual que la ubicación para la reentrada, por no decir que los restos del Tiangong-1 se convertirán en una gran bola de color azul debido al calor de la masa, que coincide a la perfección con la llegada de la estrella azul (Kachina azul).
La última señal de las profecías decía lo siguiente: “Oirás hablar de una morada en los cielos que caerá con gran estruendo. Aparecerá como una estrella azul. Muy pronto después de esto, las ceremonias de mi pueblo cesarán.”
Entonces, según los expertos en la materia, las profecías de los indios Hopi predicen nueve eventos, ocho de los cuales ya habrían sucedido: El primero sería referente a la colonización europea, la segunda al ferrocarril, la tercera a la ganadería, la cuarta a las vías ferroviarias, la quinta a las líneas telefónicas, la sexta a las autopistas, la séptima a los derrames de petróleo y la octava hacia referencia a los hippies. El noveno evento seria la caída de una estación espacial y, por si fuera poco, estos eventos desencadenarían en una guerra nuclear.
“Estas son las señales vendrán antes de la gran destrucción. El mundo oscilará de un lado a otro. El hombre blanco luchará contra otras personas en otras tierras, con aquellos que poseyeron la primera luz de sabiduría. Habrá muchas columnas de humo y fuego como Pluma Blanca ha visto al hombre blanco hacer en los desiertos no muy lejos de aquí. Solo aquellos que vienen causarán enfermedades y una gran muerte.”
Por lo tanto, parece ser que detrás de la caída de la estación espacial china Tiangong-1 hay mucho más de lo que nos cuentan. Lo cierto es que no sabemos con certeza si la gran catástrofe ocurrirá el próximo domingo de Pascua, pero lo que si sabemos es que, si las diferentes agencias espaciales lo supieran, estas no lo harían público.
¿Crees que la estación espacial china Tiangong-1 caerá en una gran ciudad? ¿Se cumplirá esta vez la profecía de los indios Hopi?
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