Este martes se han registrado en el Sol dos grandes erupciones consecutivas con capacidad de afectar las comunicaciones en la Tierra.


La primera llamarada fue de la clase X2.2, mientras que la segunda se produjo inmediatamente después, con una intensidad X1.5, informó la NASA.


“Las llamaradas solares son explosiones de gran alcance de radiación”, explicaron expertos de la agencia espacial estadounidense, quienes alertaron también de que “las radiaciones nocivas de una llamarada no pueden pasar a través de la atmósfera de la Tierra para afectar físicamente a los seres humanos sobre el terreno. Pero cuando son lo suficientemente intensas, pueden perturbar el ambiente de la capa donde viajan las señales de GPS y las comunicaciones”.

Investigadores del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NASA señalaron que no es probable que se produzca una eyección de masa coronal, una explosión de plasma emitida por el Sol, asociada con el primer brote, pero van a seguir analizando los datos recogidos durante el evento.

Con estas dos llamaradas, se eleva a siete en lo que va del 2014 el número total de estos sucesos de magnitud X, los mayores que se pueden registrar. La llamarada de mayor envergadura se produjo en febrero, alcanzando una intensidad de X4.9.