Una lente implantable de forma similar a un telescopio mejora la visión de pacientes con estadios avanzados de degeneración macular, según informa el diario "The New York Times".
El dispositivo, que ha sido desarrollado por la empresa californiana VisionCare Ophthalmic Technologies, se implanta mediante una breve cirugía ambulatoria en la retina de uno de los ojos de personas con degeneración macular que han perdido la visión central en ambos.
El implante amplía las imágenes percibidas a través de la retina, y gracias a ello dos centenares de pacientes que lo recibieron pudieron volver a leer, ver la televisión y reconocer rostros familiares, asegura el oftalmólogo Henry L. Hudson, que ha realizado un seguimiento durante los últimos cinco años de estos enfermos.
Sin embargo, Hudson advierte que la tecnología sólo mejora la percepción visual pero no cura la dolencia, y sólo un 20% de los pacientes con degeneración macular pueden beneficiarse de ella, ya que no es recomendable para personas con problemas de equilibrio.
Tras la implantación es necesario realizar una prolongada rehabilitación visual, ya que el ojo operado percibe las imágenes de mayor tamaño que el otro y también es necesario entrenar el otro ojo para que realice la función de visión periférica.
Una vez que el dispositivo sea aprobado por la FDA, agencia responsable de la seguridad alimentaria y de los medicamentos en Estados Unidos, VisionCare solicitará a la sanidad pública estadounidense que cubra este tratamiento.
El dispositivo, que ha sido desarrollado por la empresa californiana VisionCare Ophthalmic Technologies, se implanta mediante una breve cirugía ambulatoria en la retina de uno de los ojos de personas con degeneración macular que han perdido la visión central en ambos.
El implante amplía las imágenes percibidas a través de la retina, y gracias a ello dos centenares de pacientes que lo recibieron pudieron volver a leer, ver la televisión y reconocer rostros familiares, asegura el oftalmólogo Henry L. Hudson, que ha realizado un seguimiento durante los últimos cinco años de estos enfermos.
Sin embargo, Hudson advierte que la tecnología sólo mejora la percepción visual pero no cura la dolencia, y sólo un 20% de los pacientes con degeneración macular pueden beneficiarse de ella, ya que no es recomendable para personas con problemas de equilibrio.
Tras la implantación es necesario realizar una prolongada rehabilitación visual, ya que el ojo operado percibe las imágenes de mayor tamaño que el otro y también es necesario entrenar el otro ojo para que realice la función de visión periférica.
Una vez que el dispositivo sea aprobado por la FDA, agencia responsable de la seguridad alimentaria y de los medicamentos en Estados Unidos, VisionCare solicitará a la sanidad pública estadounidense que cubra este tratamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.