El gran buque de desembarco de la Flota del Mar Negro rusa Sarátov, entrará la próxima semana al puerto sirio de Tartus, base logística rusa en el Mediterráneo.
El Sarátov no es el primer buque de guerra ruso que zarpa de Rusia con rumbo al país árabe desgarrado por una guerra civil.
Según la agencia rusa Interfax, que se remite a una fuente anónima de la diplomacia militar rusa, el buque Sarátov lleva a bordo vehículos de combate y comandos de tropas especiales, cruzó este miércoles los estrechos del Bósforo y de los Dardanelos y se encuentra en el mar Egeo.
El viernes la nave debe unirse a otros buques de la Armada rusa que cumplen su misión en el Mediterráneo y la próxima semana se dirigirá a Tartus.
Cabe recordar que a finales de diciembre, otro buque de desembarco ruso, el Novocherkassk, con infantes de marina a bordo, también zarpó para reunirse en el mar Egeo con otros cinco buques de guerra rusos, encabezados por el crucero lanzamisiles Moskvá, buque insignia de la Flota del Mar Negro rusa.
Las maniobras navales rusas han causado un gran revuelo en los medios occidentales, al levantar sospechas de que Rusia estaría preparando una posible intervención en Siria.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso niega todos estos rumores, señalando que la concentración de fuerzas es necesaria para los ejercicios navales a gran escala que se llevarán a cabo en las aguas del Mediterráneo y del Mar Negro a finales de enero.
Según el Ministerio de Defensa, los ejercicios, en los que participarán las cuatro Flotas de Rusia: del Norte, del Báltico, del mar Negro y del Pacífico, serán las mayores maniobras navales rusas de las últimas décadas.
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