Se trata de la araña reclusa parda, de origen estadounidense y considerada, en ocasiones, peligrosa para los humanos por el veneno que inyecta en sus picaduras
Ante esta situación, y tras alertar al Ayuntamiento de Dos Hermanas de estos casos, la Plataforma por la Mejora de Montequinto ha repartido por el barrio quinteño una hoja informativa sobre las características de esta araña y cómo evitar su picadura. «Vimos que era más común de lo que pensábamos», reconoce una de las vecinas después de que a raíz de este aviso hayan recibido numerosos testimonios de otros tantos afectados por la picadura de este arácnido.
Tras constatar los casos, se puso igualmente en conocimiento de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, cuyos técnicos se desplazaron hasta el barrio para realizar las oportunas comprobaciones. La plataforma envió, además, una de las muestras al departamento de Entomología Aplicada de la Facultad de Biología de la Universidad de Sevilla que acabó confirmando que se trataba de esta especie, adaptada ya a nuestro entorno. Se trata, por tanto, de un tipo de araña menos peligrosa que la original americana, pero que puede afectar especialmente a niños, mayores y personas alérgicas.
Cómo identificarla
La araña reclusa parda es, como su propio nombre indica, de color pardo con una mancha oscura en la cabeza en forma de violín. No es excesivamente grande y suele encontrarse en zonas oscuras y de poco movimiento como armarios o trasteros, además de en los cuartos de baño, huecos de la bañera y sumideros y zonas de ventilación. Suele ser más activa por la noche.
Prevención
La araña sólo pica cuando se siente atacada. La persona que sufre la picadura suele notar los síntomas horas después con un dolor que puede llegar a ser intenso y por el enrojecimiento de la piel. La plataforma recomienda limpiar y mover los muebles, aspirar con vapor de agua a ser posible y ponerlo en conocimiento de las autoridades si creen haber encontrado una de ellas.
Aun así, fuentes municipales han recordado que si se tratara de un problema mayor el Servicio Andaluz de Salud hubiera puesto en marcha el protocolo de actuación para estos casos. Junto a ello, el delegado de Salud del Ayuntamiento nazareno, Raúl Gil, ha explicado que se ha realizado un tratamiento en la zona específica donde se detectaron picaduras a dos personas, a la vez que ha mandado un mensaje de tranquilidad a los vecinos ya que por el momento se trata de casos puntuales, a la espera de que nuevos informes técnicos dictaminen el carácter de la situación.
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